Por Luis de Ory:
Ya que últimamente en esta web están teniendo algo más de protagonismo los músicos australianos, aprovecho el tirón para hablaros de una vieja y oscura banda que, a pesar de tener mas de 25 años, suena absolutamente actual. Cosas del rock and roll.
Es bastante desconocida pero se merece, desde luego, un hueco de honor en Power Pop Action! Aunque simplemente sea, por que a mí, me apasionan.
Se llaman YOUNG MODERN, y con ese nombre evocan la rebeldía juvenil, el querer ser diferente a los demás, el huir de la monotonía, la diversión, y, en definitiva, esa explosión de júbilo que provocan unas buenas guitarras y unas fenomenales armonías vocales.
YOUNG MODERN se formó en Adelaida (Australia) a finales de 1977, por John Dowler, vocalista y músico con cierta experiencia, cabeza visible de la banda; junto a otros cuatro jóvenes, Michael Jones a la guitarra, (aunque en 1978 sería sustituido por Mark Carroll y un poco mas tarde, ya en los estertores de la existencia del grupo, le reeplazaría Peter Milton); Vic Yates también a la guitarra, Mark Kohler a la batería y Andrew Richards al bajo, y sustituido también en los últimos meses de existencia del combo por Mike Donovan.
Os decía que Dowler era relativamente experimentado porque venía de un grupo asentado en Melbourne que ya había tenido la oportunidad de grabar algún disco y probar el sabor de un relativo éxito. Eran SPARE CHANGE, y ya fabricaban melodías de un pop refinado y variado en estilos. Su canción mas popular fue “The Big Beat”, que era la que abría su LP (grabado entre 1976 y 1977) compuesta por otro miembro del grupo, Tony Murray, que realmente es una auténtica maravilla. Posteriormente, Dowler la incluiría en el repertorio de YOUNG MODERN y sería la única canción en la que él no participaba en su composición.
Pronto aprovecharon la oportunidad que les brindaba Topgear Records y en 1978 grababan su primer single producido por Stephen Cummings, actualmente un profesional respetado y considerado en Australia, que por entonces tenia su propia banda, THE SPORTS. En la cara A aparecía “She’s got the money” que sorprende nada mas comenzar porque la voz de Dowler recuerda mucho a la de John Fogerty aunque sin llegar al extremo salvaje del lider de Creedence. En el reverso está “Automatic” que muestra un matiz mas aterciopelado con un ligero toque nasal y que resulta realmente agradable de escuchar.
Poco después, en 1979, Local Records publicaba el LP “Play Faster” en el que se incluían estas dos canciones más otras ocho que son también potenciales cara A de single. Un disco de esos que se hace corto y que no tiene absolutamente ningún desperdicio, canciones que van desde un sonido pop y sensible de la costa oeste de USA, de finales de los 60, hasta trallazos de power pop con ecos de rock and roll clásico, como el de mi favorita del álbum, “Countdown”, que tiene un estribillo que encajaría perfectamente en un disco de hits surferos o “Red Dress On” que tiene todos los ingredientes necesarios para emocionar, un lamento, un lagrimeo de guitarra, un estribillo con fuerza y con un hipnótico punteo de guitarra que recuerda los sonidos de The Doors.
Se han reconocido herederos de su influencia los Sunnyboys y los Hoodoo Gurus, esto nos da muestra de la importancia de esta banda a pesar de la existencia fugaz que han tenido. Pero en esta corta vida nos han dejado otras joyas como la electrizante y pegadiza “Fool’s Road”, la conmovedora “She Wants to Be a Singer”, con un estribillo que consigue erizarte el pelo o la simplemente maravillosa “The Radio Song”.
Estos ya eran los estertores de YOUNG MODERN. Poco después de la grabación de “Play Faster” se trasladaron a Sydney pero esto era ya el fin. Unos meses después, en 1980, se separaban y Dowler formaba THE ZIMMERMEN con algunos miembros de la Paul Kelly Band. Nombre elegido para homenajear a Bob Dylan y que hacía Contry Rock, género que tanto gusta en Australia.
Todo esto viene a cuento porque el año pasado Aztec Music re-editó el Play Faster y además de sus diez canciones originales añade ocho bonus tracks grabados en vivo en un estudio en la que muestran un sonido mas desnudo y algo mas garajero y que en ciertos momentos es bastante mediocre en cuanto a la calidad del sonido, no en calidad de música. Desgraciadamente una canción estupenda como es “Goodbye Weekend” tiene un sonido bastante flojo. Y como no, este disco lo incluyó Not Lame en su catálogo y os digo lo que suelen decir apostillar en algunos discos: “Extremely Highly Recommended!”
Es bastante desconocida pero se merece, desde luego, un hueco de honor en Power Pop Action! Aunque simplemente sea, por que a mí, me apasionan.
Se llaman YOUNG MODERN, y con ese nombre evocan la rebeldía juvenil, el querer ser diferente a los demás, el huir de la monotonía, la diversión, y, en definitiva, esa explosión de júbilo que provocan unas buenas guitarras y unas fenomenales armonías vocales.
YOUNG MODERN se formó en Adelaida (Australia) a finales de 1977, por John Dowler, vocalista y músico con cierta experiencia, cabeza visible de la banda; junto a otros cuatro jóvenes, Michael Jones a la guitarra, (aunque en 1978 sería sustituido por Mark Carroll y un poco mas tarde, ya en los estertores de la existencia del grupo, le reeplazaría Peter Milton); Vic Yates también a la guitarra, Mark Kohler a la batería y Andrew Richards al bajo, y sustituido también en los últimos meses de existencia del combo por Mike Donovan.
Os decía que Dowler era relativamente experimentado porque venía de un grupo asentado en Melbourne que ya había tenido la oportunidad de grabar algún disco y probar el sabor de un relativo éxito. Eran SPARE CHANGE, y ya fabricaban melodías de un pop refinado y variado en estilos. Su canción mas popular fue “The Big Beat”, que era la que abría su LP (grabado entre 1976 y 1977) compuesta por otro miembro del grupo, Tony Murray, que realmente es una auténtica maravilla. Posteriormente, Dowler la incluiría en el repertorio de YOUNG MODERN y sería la única canción en la que él no participaba en su composición.
Pronto aprovecharon la oportunidad que les brindaba Topgear Records y en 1978 grababan su primer single producido por Stephen Cummings, actualmente un profesional respetado y considerado en Australia, que por entonces tenia su propia banda, THE SPORTS. En la cara A aparecía “She’s got the money” que sorprende nada mas comenzar porque la voz de Dowler recuerda mucho a la de John Fogerty aunque sin llegar al extremo salvaje del lider de Creedence. En el reverso está “Automatic” que muestra un matiz mas aterciopelado con un ligero toque nasal y que resulta realmente agradable de escuchar.
Poco después, en 1979, Local Records publicaba el LP “Play Faster” en el que se incluían estas dos canciones más otras ocho que son también potenciales cara A de single. Un disco de esos que se hace corto y que no tiene absolutamente ningún desperdicio, canciones que van desde un sonido pop y sensible de la costa oeste de USA, de finales de los 60, hasta trallazos de power pop con ecos de rock and roll clásico, como el de mi favorita del álbum, “Countdown”, que tiene un estribillo que encajaría perfectamente en un disco de hits surferos o “Red Dress On” que tiene todos los ingredientes necesarios para emocionar, un lamento, un lagrimeo de guitarra, un estribillo con fuerza y con un hipnótico punteo de guitarra que recuerda los sonidos de The Doors.
Se han reconocido herederos de su influencia los Sunnyboys y los Hoodoo Gurus, esto nos da muestra de la importancia de esta banda a pesar de la existencia fugaz que han tenido. Pero en esta corta vida nos han dejado otras joyas como la electrizante y pegadiza “Fool’s Road”, la conmovedora “She Wants to Be a Singer”, con un estribillo que consigue erizarte el pelo o la simplemente maravillosa “The Radio Song”.
Estos ya eran los estertores de YOUNG MODERN. Poco después de la grabación de “Play Faster” se trasladaron a Sydney pero esto era ya el fin. Unos meses después, en 1980, se separaban y Dowler formaba THE ZIMMERMEN con algunos miembros de la Paul Kelly Band. Nombre elegido para homenajear a Bob Dylan y que hacía Contry Rock, género que tanto gusta en Australia.
Todo esto viene a cuento porque el año pasado Aztec Music re-editó el Play Faster y además de sus diez canciones originales añade ocho bonus tracks grabados en vivo en un estudio en la que muestran un sonido mas desnudo y algo mas garajero y que en ciertos momentos es bastante mediocre en cuanto a la calidad del sonido, no en calidad de música. Desgraciadamente una canción estupenda como es “Goodbye Weekend” tiene un sonido bastante flojo. Y como no, este disco lo incluyó Not Lame en su catálogo y os digo lo que suelen decir apostillar en algunos discos: “Extremely Highly Recommended!”
Artículo escrito por Luis de Ory (lron)
Aquí puedes escuchar algunos sampler del disco:
Countdown
Fool’s Road
The Radio Song
Sports Girls
It’s not a crime